A medida que la temporada de jardinería se acerca a su fin, muchos jardineros se encuentran con una abundancia de hierbas frescas como cebollas verdes y albahaca. Sin embargo, conservar estas delicadas hierbas para usarlas en invierno puede ser un desafío. En este artículo, exploraremos dos métodos innovadores para conservar cebollas verdes y albahaca para disfrutar de su frescura y sabor durante los meses de invierno.
Método 1: congelar cebollas verdes en una mezcla de mantequilla y aceite
Una forma creativa de conservar las cebollas verdes es mezclándolas con una mezcla de mantequilla y aceite. Este ingrediente versátil se puede utilizar en diversos platos de invierno, añadiendo un toque de sabor a sopas, guisos y salteados.
Ingredientes:
Cebolletas frescas
Mantequilla (ablandada)
Aceite de cocina (opcional, para una versión más ligera)
Sal
Opcional: pimienta negra u otras especias al gusto.
Preparación:
Limpieza y preparación: Lave bien las cebollas verdes y córtelas en el tamaño deseado.
Licuar: Colocar las cebollas verdes picadas en una licuadora y agregar mantequilla ablandada, una pizca de sal y, opcionalmente, un chorrito de aceite de cocina. Licuar hasta que se integren bien los ingredientes, agregando especias si se desea.
Conservación: Transfiera la mezcla a bandejas de cubitos de hielo y congélela hasta que se solidifique. Una vez congelados, transfiera los cubitos a una bolsa para congelador para almacenarlos a largo plazo.
Método 2: Almacenamiento en seco en botellas de plástico
Otro método innovador para conservar las cebollas verdes consiste en almacenarlas en seco en botellas de plástico. Esta técnica no solo ahorra espacio, sino que también conserva la textura y el sabor de las cebollas.
Preparación:
Botella: Elija botellas de plástico con boca ancha y llénelas con las cebollas verdes picadas. Las botellas cuadradas o rectangulares son ideales para un almacenamiento eficiente en el congelador.
Conservación: Cierra bien las botellas y colócalas en el congelador. Las cebollas verdes picadas se mantendrán frescas y sabrosas durante meses.
Conclusión:
Conservar cebollas verdes y albahaca para usarlas en invierno no tiene por qué ser complicado. Si utiliza métodos innovadores, como mezclarlas con mantequilla y aceite o guardarlas en botellas de plástico, podrá disfrutar de la frescura y el sabor de estas hierbas durante los meses de invierno. Ya sea que añada una cucharada de mezcla de cebollas verdes con mantequilla a un plato sabroso o espolvoree albahaca picada sobre un plato de pasta caliente, estas hierbas en conserva elevarán su cocina de invierno a nuevas cotas de sabor y comodidad.